Dr. Darío Maida, Dr. Jorge Magaña INCICH
En la actualidad, aproximadamente del 50 al 75% de los pacientes con dispositivos cardíacos implantados podrían tener indicaciones para algún estudio de imagen por resonancia magnética durante el tiempo de vida de estos dispositivos (2, 5). Debido a este alto porcentaje de pacientes, es importante conocer a fondo la realidad de la relación actual entre los marcapasos y los equipos de resonancia magnética.
La presencia de un marcapasos implantable, fue considerada ampliamente entre los años de 1982 a 1996, como una contraindicación absoluta para la realización de estudios de resonancia magnética, sin embargo este punto de vista estuvo basado, en su mayoría, en cuestiones adversas de seguridad para el paciente, comprendidas en este periodo(3).
Estas preocupaciones sobre la seguridad están basadas en la presencia de componentes ferromagnéticos en los dispositivos, que en los fuertes campos magnéticos utilizados, pueden llevar a movimiento y vibración del artefacto cardíaco. Estas fuerzas se relacionan directamente con la cantidad y forma del contenido ferromagnético, su localización en relación con el sistema y la fuerza del campo magnético (2).
Las interacciones entre el material ferromagnético y las fuerzas magnéticas de la resonancia pueden ocasionar diversos efectos adversos; entre ellos se incluyen: calentamiento del electrodo con daño al tejido adyacente, inducción de fibrilación ventricular, ritmo atrial acelerado, mala función del interruptor del marcapaso, paso asincrónico, alteración en la programación del aparato con potencial daño en los circuitos internos y movimiento del dispositivo, entre otros.
Actualmente la resonancia magnética se encuentra contraindicada en la mayoría de los pacientes dependientes del marcapaso. Sin embargo desde 1996, varios cambios en la electrónica y uso de diferentes materiales para la fabricación de los marcapasos, han hecho reconsiderar a su uso como una contraindicación absoluta para los estudios de resonancia magnética. En la terminología actual, los marcapasos compatibles con resonancia se encuentran en la categoría de “Uso Condicionado”, es decir, un objeto que se ha demostrado no representa ningún peligro conocido en un entorno de resonancia específico, con ciertas condiciones de uso.
El diseño de los marcapasos compatibles con la IRM, se encuentra relacionado con el uso de pocos componentes ferromagnéticos, diseñados para resistir fuertes campos electromagnéticos de hasta 1.5 T del escáner. Uno de los mecanismos en el diseño de marcapasos para limitar las interacciones del campo magnético es la minimización del contenido ferromagnético del generador. Esta reducción del contenido ferromagnético se puede lograr mediante el uso de sustancias no ferromagnéticas conductoras que están hechas de materiales no magnéticos. Hay limitaciones importantes en la elección de los mismos, ya que los materiales deben ser conductores, duraderos y biocompatibles (1, 2).
Los materiales utilizados en los marcapasos y electrodos compatibles, que están expuestos directamente al tejido y los fluidos corporales son titanio, poliuretano, adhesivo de silicona y caucho de silicona, platino, iridio, nitruro de titanio, y adhesivo de poliuretano. Estos materiales se han utilizado durante varios años y han sido previamente verificados y aprobados para su biocompatibilidad (4).
Los marcapasos compatibles están diseñados específicamente para eliminar el máximo contenido ferromagnético y los efectos mecánicos del propio campo magnético; maximizar el circuito del generador eléctrico y blindaje contra la energía magnética y las ondas de radiofrecuencia; limitar la transferencia de energía de la radiofrecuencia en calor o la estimulación eléctrica sobre los conductores, y ofrecer modos de programación para minimizar el mal funcionamiento del dispositivo (3, 7).
Actualmente en el mercado mundial hay una amplia gama de electrodos y dispositivos cardíacos con compatibilidad condicionada para la IRM que están aprobados para el entorno de la resonancia. Tres compañías médicas principalmente, Biotronik, en Alemania; Medtronic y St. Jude Medical, en Estados Unidos, tienen ahora marcapasos compatibles con RM y ya están aprobados para su uso en Europa.
Recientemente, el estudio de Medtronic EnRhythm MRI SureScan Trial, no demostró arritmias relacionadas con marcapasos, fallas de inhibición en pulsos o de salida del sistema, o mal funcionamiento durante el estudio con RM.
El 8 de febrero de 2011, la FDA (Food and Drug Administration) aprobó el Sistema de Revo MRI, este sólo y exclusivamente con electrodos de estimulación MRI 5086 CapSureFix MRI y el Software SureScan, todos de la misma marca (Medtronic).
En el futuro, cualquier paciente que haga una cita para resonancia magnética, debe mencionar que tiene un marcapasos implantado compatible. Es de suma importancia tener su tarjeta de identificación del marcapasos cuando se presente el estudio, para poder identificar el dispositivo como seguro para la realización del examen.
Algunos marcapasos tienen que ser programados en otro modo de estimulación antes de la resonancia magnética. Después de la resonancia magnética, se reprogramará al ajuste inicial.
Es recomendable sin embargo que el tiempo total de exploración para el paciente no exceda los 30 minutos. Debe mantenerse a la mano equipo de emergencia para la reanimación del paciente y personal certificado para la realización de las maniobras necesarias.
El paciente debe además estar supervisado de manera continua con los siguientes parámetros: saturación de oxígeno arterial, presión arterial y electrocardiograma continuo.
Para más información sobre la compatibilidad de los marcapasos con la resonancia magnética, se puede consultar de manera libre la dirección electrónica: www.mrisafety.com, donde con el nombre y especificaciones del marcapaso, de una manera rápida y sencilla, se obtendrá información para cada caso específico.
Referencia: Martin et al., Magnetic Resonance Imaging and Cardiac Pacemaker Safety at 1.5-Tesla JACC, Vol. 43, No. 7, 2004; Shinbane et al., Journal of Cardiovascular Magnetic Resonance 2011, 13:63; Loewy et al., Reconsideration of Pacemakers and MR Imaging RadioGraphics, 2004, 24:1257–1268¸FDA consent of approval on REVOMRI; Sutton, R., Kanal, E., Wilkoff, B.L., Safety of magnetic resonance imaging of patients with a new Medtronic EnRhythm MRI SureScan pacing system: clinical study design Trials, 2008, 9:68; www.mrisafety.com¸www.magneticresonancesafetytesting.com